Hace seis años se registró el último triunfo de la Selección Nacional durante una competencia de la Copa América: 3-2 sobre Ecuador en Valparaíso (Chile). A partir de ese resultado, el cuadro verde ha sufrido diez derrotas, marca que quiere voltear en los dos próximos compromisos que le restan por la fase de grupos de Brasil 2021.
El inicio del seleccionado boliviano en la Copa América de Brasil tuvo dos derrotas: Paraguay (1-3) y Chile (0-1) que han engrosado la cifra adversa que carga el plantel. El 15 de junio de 2015 obtuvo el triunfo sobre Ecuador (3-2), que quedó como un punto referencial distante de éxito y un objetivo por igualar.
“El grupo tiene ganas de tener una victoria, de regalarle un triunfo al país. El viernes se hizo un buen partido, pero no se dio el resultado, tuvimos llegadas al arco rival que no pudimos concretar y eso es lo que nos falta ahora y esperemos que para el próximo sea tenencia del balón y poder concretar”, declaró el mediocampista Moisés Villarroel.
Antes de la participación en esta Copa, Bolivia cerró su actuación sin puntos en las ediciones Estados Unidos 2016 (sede de la Copa América Centenario) y Brasil 2019, quedando estancada en la fase de grupos. En Chile 2015, pudo acceder a cuartos de final gracias al triunfo contra los ecuatorianos, después vinieron dos caídas: Chile (0-5) y Perú (1-3).
“Nos enfocamos en Uruguay, vamos a ver cómo se para, qué es lo que hacen, qué les cuesta, cuáles son sus virtudes y esperemos sumar una victoria que la necesitamos, que es de vital importancia”, agregó Villarroel en entrevista con el departamento de prensa de la FBF.
El jueves 24 (17:00 hora boliviana) será el cotejo contra Uruguay, la tercera presentación del “equipo de todos” en este certamen. Contra Argentina juega el 28 de junio (20:00). En estos encuentros, el elenco del entrenador César Farías apuesta sus chances de clasificarse a la siguiente ronda, que abre sus puertas a cuatro de los cinco seleccionados por grupo.
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