El 27 de mayo de 2015, el lujoso hotel Baur au Lac de Zúrich fue epicentro del terremoto que exhibió una trama de corrupción y sobornos en la FIFA. El FIFAGate también hizo temblar las estructuras de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). Seis años después, el máximo ente del balompié boliviano está en ruinas, luego de siete presidentes y “ningún cambio”.
Este jueves, el Día de la Madre en Bolivia, se recuerda la madre de las batallas en el fútbol mundial. “Después de seis años, nada cambió en el fútbol mundial y en Bolivia. La estructura mafiosa que dejó (Carlos) Chávez se está manteniendo en la actual estructura”, identificó el experimentado Juan Carlos Costas, periodista deportivo.
Hace seis años (27 de mayo de 2015), se destapó el FIFAGate, que fue uno de los peores casos de corrupción sistemática con presidentes de las federaciones de Sudamérica y Centroamérica, que le costó el cargo al entonces presidente de la FIFA Joseph Blatter y el titular de la UEFA, Michele Platini.
La Fiscalía General de Estados Unidos acusó al dirigente boliviano Chávez de haber recibido 7,5 millones de dólares de soborno para viabilizar la Copa América en Chile 2015.
La fiscal Loretta Lynch lideró la acusación contra los jefes del deporte en diez países sudamericanos por presunto cobro de sobornos con una “estructura mafiosa” que se replicó en el país. Para Costa, los miembros del actual comité ejecutivo de la FBF “forman parte de la estructura podrida de Chávez y el fútbol está como está porque hay dos corrientes delincuenciales, de la cual quiero excluir al señor Fernando Costa (actual presidente de la federación). El pobre Costa está sufriendo los avatares de las dos corrientes que sobreviven de la corrupción de Chávez”.
Siete titulares en seis años
Desde que estalló el FIFAGate, que desencadenó en la salida de Chávez de la presidencia, la FBF sumó siete titulares: Marco Ortega (interino), Rolando López Herbas, Marco Peredo Mercado (interino), Carlos Ribera (interino), César Salinas Sinka (+), Marcos Rodríguez Ibáñez (interino) y Ángel Fernando Costa Sarmiento.
Durante estos seis años, la federación no encontró estabilidad. Renán Quiroga, vicepresidente del club Wilstermann, señaló que la solución para salir de la crisis deportiva e institucional en la que está sumido el fútbol nacional es efectuar una reestructuración total en la dirigencia, para dar paso a gente idónea, capaz de llevar las riendas de la FBF hacia mejores días. “Para terminar con este barullo hay que cortar de raíz lo malo, todo el mundo tiene que irse”, sostuvo el dirigente al diario Los Tiempos, a propósito del conflicto que generó el recurso de amparo constitucional que presentó Robert Blanco a la Sala Cuarta del Tribunal Departamental de Santa Cruz, con el designio de asumir la presidencia del ente.
A propósito, la audiencia de Blanco y los miembros del comité ejecutivo de la FBF, está programada para hoy (9:00) en la capital cruceña.
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