A través de una misiva firmada por Monserrat Jiménez, secretaria general adjunta, la Confederación aclaró que el tema debe ser resuelto por la misma FBF. El ente sudamericano respondió así a la “denuncia de grave incumplimiento de prohibición”, que envió el directivo Marco Rodríguez.
Rodríguez reclamó ante la Conmebol que Robert Blanco acudió a tribunales no deportivos para ser reconocido como presidente de la federación. “En lugar de acudir a los tribunales deportivos señalados por el Estatuto de la FBF, FIFA y Conmebol, el señor Robert Blanco ha llegado a transgredir las expresas prohibiciones contenidas en el artículo 59 numeral 2) del Estatuto de la FIFA y el artículo 13 inc f) del Estatuto de la Conmebol, optando por someter a decisión de la justicia ordinaria de Bolivia algo tan trascendental como la determinación de quién debe asumir la presidencia de la Federación Boliviana de Fútbol”, dice la denuncia del pandino.
Tomando en cuenta que sólo tiene la versión de una parte de una de las partes involucradas en el lío federativo, la Conmebol responde que “luego de revisar en detalle los hechos reportados, pareciera ser que el presente asunto guarda relación con la gobernanza interna de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF)”.
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