Nació un jueves. Era año bisiesto. Llegó al mundo un 16 de agosto de 1928, en una Asunción que vivía el preludio de la Guerra del Chaco. Su padre era Embajador de Bolivia ante el gobierno de Paraguay. Pero Mario Mercado Vaca Guzmán era boliviano, con sangre celeste.
Don Mario habría cumplido hoy 92 años. Comenzó a convertirse en leyenda a los 34 años, cuando tomó el mando de su Bolívar. “Dentro de pocos días, Mario Mercado será posesionado como presidente de la Academia; en 1962 estuvo en ese mismo cargo, pero debió renunciar por motivos particulares”, escribió el periodista Lorenzo Carri (+), en la revista Panorama, publicada el 19 de febrero de 1963.
Su amigo y colaborador cercano, Guillermo Monje escribió hace cuatro años el siguiente texto para homenajear al inolvidable Don Mario.
Lamentablemente esa vida terminó al morir, cuando en su avión, acompañado por el Dr. German Jordán, el capitán Rodolfo Flores Morelli de The Strongest y el presidente de San José, Carlos Sánchez, iba a Sucre donde tendría una reunión de concordancia con otros dirigentes de Santa Cruz y Potosí para organizar nuevos sistemas de competencia en el fútbol boliviano, que fue su mayor preocupación al margen de su actividad empresarial. Fue entonces que nuestro país perdió un gran dirigente deportivo que puso a ese fin no sólo su capacidad sino su dinero, un dinero sin retorno ya que lo que gastaba era algo sin pedir devolución.
Para don Mario Mercado el ser dirigente deportivo era un servicio no un lucro. Por ejemplo, el Club Bolívar al que dirigió por muchos años, era una institución como otras donde sólo el jugador, los técnicos y empleados podían ser rentados. En esa época la FIFA no cedía ningún centavo a los clubes como ahora acontece, bañándolos con millones de dólares. La única retribución que podían esperar los dirigentes eran las victorias del equipo.
Recordando a don Mario Mercado no debemos olvidar cuanto hizo por engrandecer el patrimonio del Club Bolívar de tal manera que su legado fue enorme en ese sentido, construyendo el estadio Libertador Simón Bolívar y comprando el Supermercado de Obrajes en la Av. Siles, esquina calle 17. Su legado moral en sentido de sólo aportar y aportar sin pedir devolución de lo que gastaba constituye otro ejemplo para los clubes, ligas y federaciones de fútbol.
Hay que recordar también su gran preocupación por el mejoramiento técnico del fútbol boliviano a todo nivel, desde divisiones inferiores hasta los estamentos profesionales y las selecciones nacionales.
No debo olvidar las gestiones que hizo don Mario ante el Gobierno para que los clubes Bolívar y The Strongest obtengan préstamos para construir sus estadios. Al recibir la aceptación del Gobierno, fue grande su entusiasmo cuando visitó a don Rafael Mendoza para comunicarle la decisión del Gobierno, cosa que para el dirigente stronguista fue una gran sorpresa por cuanto las gestiones de don Mario eran absolutamente reservadas en tanto que el club The Strongest no tenía conocimiento de nada. Con sus préstamos, Bolívar emprendió la construcción del estadio Libertador donde la selección boliviana ganó a la selección uruguaya. The Strongest construyó con ese préstamo el estadio de Achumani que fue el punto de partida para que más adelante esta institución emprenda obras de infraestructura que son ejemplares para todos los clubes del país. Como dije anteriormente, ese fue el aporte de don Mario Mercado al deporte nacional.
domingo, 16 de agosto de 2020
Don Mario Mercado, 92 años de un gran bolivarista
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario