La pulseta por la presidencia de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) entre Marco Rodríguez y Robert Blanco empieza a generar roces.
Blanco, quien inició gestiones ante la FIFA y CONMEBOL con la intensión de asumir como presidente FBF, denunció este lunes que no le permitieron ingresar a su oficina de Santa Cruz y que los funcionarios de la Federación no le contestan al teléfono para tener una explicación.
Con esta reacción, Blanco dijo estar preocupado porque entiende que los administrativos por ahora solo acatan las órdenes de Marco Rodríguez, quien en la última reunión de comité ejecutivo de la FBF fue posesionado como el nuevo titular del ente matriz, sucediendo en el cargo a César Salinas, que falleció el pasado 19 de julio.
“Estamos empezando muy mal, pero también soy hombre de hacerme respetar y hacerme escuchar. Asistí hoy a mi oficina y está cerrado el edificio; me dijeron que estará así hasta que Marco Rodríguez autorice su apertura. Ni con don César Salinas, con quien tenía diferencias, pasaba esto. Ni los administrativos me contestan el teléfono. Me han aislado. Esto está peor que antes”, dijo el directivo, quien espera la respuesta de FIFA y CONMEBOL para definir su rol en la FBF.
Blanco sostiene que él debe ocupar el cargo de presidente de la FBF tras el fallecimiento de Salinas, habida cuenta que este comité ejecutivo fue elegido y posesionado en aplicación del Estatuto que se aprobó en el 2017 y que de acuerdo al artículo 25 el primer vicepresidente es el encargado de la División Profesional, por lo tanto el que debe asumir es él, no así Rodríguez, quien tomó el mando apegándose al mismo Estatuto cuyo referido artículo (25) fue modificado (ahora el primer vicepresidente es el titular de la División Aficionados) en el último congreso de 2019 y que le da potestad para ser elegido presidente.
“He sido engañado y por eso recurrí a un amparo constitucional”, sostuvo Blanco.
Marco Rodríguez está sorprendido por las declaraciones de Blanco y aclaró que la presidencia de la FBF le corresponde por apego al Estatuto, lo cual no debe generar disputa alguna con Blanco.
Explicó que las oficinas de la FBF en Cochabamba y La Paz están funcionado en el horario continuo de 9:00 a 13:00 y que la de Santa Cruz se cerró porque no hay actividad administrativa. “Si llamaba a los funcionarios de Santa Cruz seguro que le abren. Está mintiendo Robert (Blanco) porque incluso a su carta se le respondió pese a que los funcionarios están aislados porque están a la espera de los resultados del segundo test que se hicieron por el Covid-19”, dijo Rodríguez.
Además, el pandimo dijo que el que no contesta las llamadas telefónicas es Blanco y sobre los reclamos del directivo cruceño aclaró que las respuestas de la FIFA y CONMEBOL serán decisivas para confirmar quien de los dos quedará en el puesto de acuerdo a normativa.
“No puedo hablar nada en contra de Robert Blanco porque está en su derecho el reclamar lo que cree que es correcto. Mi compromiso es buscar la unidad del fútbol boliviano. Si muestro discriminación por algún afiliado en este momento no sirvo”, puntualizó. (28 JUL 2020)
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