“Necesitamos la aprobación del Gobierno, del ministerio para aplicar el plan. Necesitamos un lugar donde los jugadores puedan quedarse concentrados, con un servicio de hotel, un gimnasio, una cancha de entrenamiento”, explicó Jaime Espinoza, médico de la Verde que dirige César Farías.
La FBF envió ayer a la Sociedad Boliviana de Medicina del Deporte los protocolos de bioseguridad y solicitó autorización para el reinicio de las actividades del fútbol.
La federación solicita que se autorice una “concentración de la Selección nacional absoluta. Aplicación del protocolo de selecciones (encapsulamiento sanitario) desde el 15 de julio".
“Los jugadores no tendrán contacto con el exterior, podríamos tener todas las medidas de seguridad y con pruebas en la concentración”, especificó Espinoza, quien aclaró que el viernes se hará una explicación a los presidentes de los clubes de la División Profesional.
Según el especialista, aún no se definió el lugar de la concentración del combinado nacional que iniciaría así una concentración previa al inicio de la Eliminatoria, que para la FIFA comenzará en septiembre. “Cuando el Gobierno y la sociedad de la medicina deportiva aprueben el proyecto se pondrá la fecha y el lugar”, resaltó y añadió que la duración de la concentración “depende de cuándo comience el fútbol” de la División Profesional.
El documento difundido ayer por la FBF muestra además el retorno a entrenamientos, según protocolo, para julio y el retorno a competiciones desde agosto.
Hace casi dos semanas, este medio consultó a Carlos Aragonés y Luis Orozco si era bueno aprovechar el tiempo de la cuarentena para que la Selección trabaje en una concentración cerrada al menos un mes para aprovechar el tiempo. Ambos coincidieron en que se debía utilizar el receso para entrenar.
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