El coronavirus complicó el desarrollo normal del campeonato Apertura. La primera propuesta de los dirigentes fue pagar el 50 porciento de marzo y el 25 porciento de abril y mayo. Todo fue rechazado por Fabol (Futbolistas Agremiados de Bolivia) que quiere que todos los clubes paguen febrero y luego definir los porcentajes de reducción.
“Son cuatro clubes que pagaron febrero y faltan diez”, dijo David Paniagua, secretario general de Fabol.
Por su parte, el vicepresidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) Robert Blanco defiende la postura de los clubes y alegó que el dinero no alcanza para pagar los salarios con normalidad. Además seis presidentes expresaron su decisión de dar un paso al costado si no apoyan la reducción de salarios, el jueves podrían oficializarse dichas renuncias.
“Los clubes profesionales tomarán el jueves decisiones. Las dirigencias mostraron voluntad en todo momento para negociar. Los clubes que deben febrero pondrán su condicionante, que pagarán cuándo vean el panorama sea claro, porque, podría no continuar el campeonato”, dijo Blanco.
Varios clubes no quieren jugar sin público, una medida que cobra mayor fuerza en las últimas semanas, para continuar con el torneo. Los dirigentes deberían gastar cerca de 15.000 dólares al mes para pagar los gastos de logísticas (estadio, árbitros, etc), sumado las plantillas que deben cumplir.
ACUERDO DIRECTO CON JUGADORES
La presidenta de The Strongest Inés Quispe mencionó que habló con algunos jugadores de su club y le expresaron la predisposición de llegar a un acuerdo. Quispe criticó la postura de los representantes de Fabol que todavía no acordar una solución con los clubes. Otros dirigentes también hablaron directamente con sus jugadores.
“Es lamentable que la Federación este en campaña abierta para desprestigiar a Fabol. Ellos (los dirigentes) podrían sentarse con los jugadores y llegar a un acuerdo, pero no tienen credibilidad porque (los jugadores) no creen en sus dirigentes”, dijo Paniagua.
DESCONOCER A FABOL
El Secretario General de Fabol, David Paniagua, se siente tranquilo porque el gremio de jugadores tiene todos los papeles en orden. Algunos dirigentes consideraron que no cuentan con legalidad para hablar en nombre de los jugadores, aunque está afiliado a Fifpro (Federación Internacional de Futbolistas Profesionales).
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