Los árbitros del fútbol boliviano también están sufriendo las consecuencias de este duro periodo que atraviesa la sociedad boliviana y del mundo por la pandemia de coronavirus.
La inactividad les ocasiona un perjuicio económico, más allá de que la mayoría complementa su profesión de colegiados del fútbol con otras actividades, que no son netamente futbolísticas.
Ayer, se hizo público una carta que la Asociación Boliviana de Árbitros de Fútbol (ABAF) envió al presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, César Salinas, en la que le piden ayuda económica de Bs 40.000 para aliviar sus necesidades, tomando en cuenta que en estos momentos no tienen ingresos.
“Queremos hacer conocer a su persona que de los 610 árbitros registrados en nuestra Asociación-y que prestan sus servicios a la FBF a través de las asociaciones departamentales- un 80 por ciento son profesionales independientes, emprendedores micro empresarios y estudiantes universitarios, que dejaron de percibir ingresos por las restricciones de la cuarentena, viéndose agravada esta situación con la suspensión de toda actividad futbolística”.
En el documento aclaran que se trata de un préstamo para ser distribuido entre sus afiliados y que será devuelto una vez se restablezcan los campeonatos. La carta es firmada por Víctor Hugo Chambi y Jorge Mancilla, presidente y secretario general, respectivamente de ABAF.
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