La selección se queda parada por varios meses

A cuatro meses del inicio de las eliminatorias para el Mundial Qatar 2022, programado para marzo del próximo año, la selección nacional perdió valioso tiempo por los conflictos sociales y políticos: no pudo jugar los partidos que estaban programados en la fecha FIFA de noviembre y tampoco podrá reunirse entre diciembre y enero.

Sin la posibilidad de realizar al menos algún miniciclo, el año se ha terminado para la Verde, contrariamente a los planes que tenía el cuerpo técnico encabezado por César Farías, de aprovechar los espacios que, según la programación inicial, estaban disponibles.

Pero la crisis que comenzó el 23 de octubre en el país, y duró un mes, obligó a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) a suspender seis jornadas del torneo Clausura y los amistosos de la Verde ante Chile y Panamá, entonces todo se trastocó para el seleccionado.

Con diciembre completo para la conclusión del Clausura, en enero y febrero del próximo año no habrá fechas FIFA, entonces es también improbable que Bolivia pueda jugar algún amistoso más, salvó que la FBF consiga algún partido en ese lapso.

Como están las cosas, la selección absoluta podría volver a la actividad solo con carácter previo a su primer partido de las eliminatorias mundialistas.

También quedó afectada la Sub-23, cuya labor de preparación con vistas al Preolímpico de Colombia debía comenzar el 12 de diciembre. Igualmente fueron suspendidos los dos partidos que debía jugar contra Perú en Lima.

Con el cambio de programación del torneo Clausura, ahora en el mejor de los casos la concentración se iniciará el 30 de diciembre y apenas tendrá tres semanas de preparación, ya que su debut está marcado para el 22 de enero contra Paraguay, para luego medirse el 25 ante Uruguay, el 28 con Brasil y el 31 ante Perú.

El Preolímpico entregará dos boletos a la Conmebol para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Fuentes de la FBF señalaron que Farías maneja la posibilidad de concentrar al equipo en Santa Cruz, aunque no se descarta la posibilidad de llevar al grupo a un centro de entrenamiento en el exterior y preparar allí su participación antes de viajar a Colombia.

El DT estableció su residencia en Santa Cruz, donde estos días ve partidos tanto de la Copa Simón Bolívar (Real Santa Cruz vs. Municipal de Vinto) como los del torneo Clausura.