La continuidad del torneo Clausura de la División Profesional pende de un hilo. No sólo hay que esperar que los conflictos sociales en el país encuentren una solución en las siguientes 48 horas, también hay que solucionar los problemas económicos que tienen clubes como San José y Sport Boys.
El presidente de Oriente Petrolero, Ronald Raldes, fue contundente al mencionar que Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) no permitirá la reanudación del campeonato si existe jugadores que se encuentran en huelga reclamando sus salarios devengados.
"Hay equipos que están en paro y será difícil comenzar el torneo, mientras esos temas no se solucionen, Fabol no va a dejar que comience el campeonato", subrayó Raldes.
El asesor legal de la agremiación, David Paniagua, pidió que “cualquier decisión que tome la dirigencia debe ser consensuada con nuestro gremio, no podemos quedar al margen si el torneo no continúa”, declaró Paniagua.
Ambos clubes perdieron la pasada semana tres puntos cada uno por decisión del Tribunal de Disciplina de la Federación Boliviana de Fútbol, que ejecutó la resolución que dictó el Tribunal de Resolución de Disputas.
Sin embargo, las dos entidades tiene serios problemas económicos y lo que es peor, aún no tienen el visto bueno para acceder ala licencia de clubes que les permita actuar en 2020.
Los jugadores Santos reclaman el pago de dos sueldos, de los cuatro que les adeuda la dirigencia para poder volver al trabajo. En el caso de los warneños, tienen cinco meses de deuda y su presidente (Carlos Romero), no tiene un paradero conocido.
lunes, 18 de noviembre de 2019
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