La convocatoria final de Dudamel revela, por sus ausencias, que el seleccionador venezolano se decantará por poblar la zona medular y poner en cancha a un único hombre en punta, una estrategia que ya le rindió frutos en el ciclo de amistosos del pasado marzo.
Entonces, Venezuela se impuso por 3-1 a Argentina en Madrid -en el regreso de Lionel Messi a la Albiceleste- con un esquema de cuatro zagueros y cinco volantes, tres de ellos de corte defensivo.
El histórico triunfo convenció al técnico de aplicar estilos como el 4-5-1 o el 4-3-2-1, de forma pública ha dicho que la plantilla que confeccionó le permitirá variar incluso a un esquema con tres delanteros.
Pero esta declaración se cae al revisar un listado de apenas tres delanteros naturales, dos de ellos, Salomón Rondón (Newcastle) y Fernando Aristeguieta (América de Cali), de características tan similares que será muy poco probable verlos juntos en cancha.
Completa el trío de arietes el goleador del Atlanta United, Josef Martínez, quien apunta a ser el recambio de Rondón, favorito para apuntalar el ataque por su buen desempeño en la liga inglesa.
Tomás Rincón, del Torino, y Yangel Herrera, del Huesca, lucen con el cupo asegurado en la línea de tres volantes destructores que alista Dudamel.
La propuesta en mitad de cancha la completan dos extremos veloces y con energía para volver y defender, y de estos al seleccionador les sobran para elegir: Jhon Murillo (Tondela), Adalberto Peñaranda (Watford), Jefferson Savarino (Real Salt Lake) y Darwin Machís (Cádiz).
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