“Tenemos dos semanas hasta el encuentro inaugural, por lo que ya está planificado que una de ellas, más seguro la primera, será de reforzamiento físico, en la que los muchachos van a estar mejor; es más, el objetivo es tratar de igualar a todos en ese aspecto”, dijo Jiménez optimista en la previa a encarar la aventura en Brasil.
Para Jiménez, el partido contra el campeón del mundo sirvió de mucho, ya que se sacaron conclusiones positivas para buscar mejorar sustancialmente en estos días de trabajo que se vienen. La Copa entusiasma, desafía al cuerpo técnico y a los jugadores, porque el objetivo es avanzar más allá de la fase de grupo, donde se debutará ante Brasil, el 14, y luego se continuará ante Perú (18) y Venezuela (22).
“Nos vamos contentos, no por el resultado, sino por el tema futbolístico, pues nos hace pensar que estamos en el camino correcto. Los jugadores y nosotros sabemos que el resultado no es lo que más nos preocupa, nos ayuda que se comprenda lo que el cuerpo técnico quiere”, explicó el preparador físico.
Hace tiempo que se viene trabajando en la ‘cabeza’ de los jugadores, buscando afianzar lo que Eduardo Villegas pretende. Jiménez también reconoció que hay una gran diferencia entre los nuestros y Francia, y eso se lo pudo ver el domingo en Nantes (derrota por 2-0).
“Los seleccionados estuvieron bien físicamente, pero biotipológicamente hay mucha diferencia con los franceses, que tienen una contextura muy envidiable; lógicamente que eso es una diferencia cultural, pero tratamos de equiparar este tema con otras cualidades nuestras”, apuntó. De acá en adelante, Jiménez confía en que el equipo muestre otra cara el 14 ante Brasil, pues anteriormente no tuvieron tiempo para trabajar como hubieran querido.
“No logramos realizar un trabajo ideal en la parte física, pues nos hemos reunido en cuatro microciclos, de tres días cada uno, tiempo en que prácticamente no se hace nada”, añadió.
Tras llegar a Brasil, el plantel trabajará en el centro de desarrollo deportivo del club Sao Paulo, en la localidad de Cotia, distante 30 kilómetros de la urbe paulista. Hasta el 11 de junio los costos de la preparación corren por cuenta de la FBF, ya que a partir de esa fecha deben trasladarse hasta el hotel Hilton Morumbí, que le asignó la organización de Conmebol para su estadía durante el campeonato. Dentro de la planificación del cuerpo técnico que viajó en la línea Iberia hasta San Pablo, es trabajar a doble turno.
El técnico Eduardo Villegas viajó hace meses hasta Cotia para aprobar el lugar de trabajo con el objetivo de encarar una preparación adecuada para llegar en las mejores condiciones al torneo que entusiasma al plantel.
El intenso partido contra Francia el domingo en Nantes dejó algunos jugadores golpeados. Entre los de consideración están el arquero Carlos Emilio Lampe y el lateral izquierdo y capitán, Marvin Bejarano, aunque el primer informe indica que no es nada grave.
El médico de la Verde, Guillermo Aranda, explicó que en el caso de Lampe tuvo un golpe en la espalda, haciendo recordar la estirada a puro reflejo en la que despejó el balón tras un cabezazo de Antoine Griezmann, en la primera parte del encuentro. Carlos terminó golpeando su espalda con el palo derecho de su portería.
Fue fuerte el golpe, pero no es para preocuparse porque Carlos se encuentra bien”, señaló Aranda poco antes de partir hacia Madrid y luego seguir viaje a San Pablo para encarar la Copa América.
El médico también explicó que Marvin acabó el encuentro con un golpe en el tobillo, pero tampoco es grave, por lo que no tendrá problemas para entrenarse normalmente hoy, luego de llegar a San Pablo, Brasil, donde comenzará la apuesta para encarar el torneo.
Lampe fue la figura del encuentro disputado ante el campeón del mundo y evitó un resultado abultado con sus buenas intervenciones. Mientras que Bejarano es una de las piezas importantes para el DT Eduardo Villegas, que le dio el cintillo de capitán. De todas formas, al llegar, ambos serán observados por los profesionales.
Rostros de cansancio tras las muchas horas del viaje hasta Brasil
Como en la ida a Francia, ayer la selección nacional tuvo un día intenso por el largo viaje desde Nantes hasta San Pablo, Brasil, donde llegará hoy por la tarde y se instalará en el centro de desarrollo deportivo de Cotia.
La delegación boliviana viajó hasta Madrid en dos grupos, por una cuestión de espacio. A las 7:00, dejaron Francia Carlos Lampe, Marcelo Martins, Luis Haquin, José María Carrasco, Alejandro Chumacero y Roberto Fernández; los seis esperaron al resto de sus compañeros y al cuerpo técnico que partieron desde Nantes, ayer por la tarde.
Luego, por la noche, cerca de las 11:45, todos se trasladaron hasta San Pablo, donde se espera arriben por la tarde para comenzar el trabajo de cara al debut del torneo más antiguo del mundo.
Según lo planificado por el cuerpo técnico, a las 17:00 hora de Brasil (16:00 hb) se realizará una activación física como es habitual cada vez que se tiene un largo viaje, pues entre vuelo y espera por la escala serán más de 20 horas de desgaste.
A quienes más se les notaba el cansancio en el rostro era a aquellos que habían jugado el día anterior en Nantes.
Por dentro
El comité ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) dejó Nantes ayer muy temprano y se trasladó hasta París para participar del congreso de la FIFA, que comienza hoy y finalizará el fin de semana. César Salinas, el presidente de la FBF, comanda la comitiva nacional.
José Vargas, Ramiro Vaca, Henry Vaca y Ronny Montero quedaron al margen de la lista de 23 que participarán en la Copa América, aunque dos de ellos trabajarán con el plantel como invitados.
Guillermo Viscarra, arquero de Bolívar y de la selección nacional, se recupera de una lesión en el hombro que lo tiene al margen desde hace un par de meses. Pasó por la concentración en Nantes para saludar a sus compañeros.
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