Bolivia pagó caro una desconcentración en la recta final del partido ante Japón (1-0) este martes en el estadio Noevir, de la ciudad de Kobe. El encuentro por fecha FIFA fue el segundo de la Verde, fuera del país, en el ciclo de Eduardo Villegas. El primero ocurrió hace cuatro días ante Corea del Sur (1-0) también en suelo asiático.
El primer tiempo ante los ‘Samuráis Azules’ fue equilibrado con un juego parejo de ambos seleccionados. Bolivia tuvo en Raúl Castro al hombre que hizo la pausa en el medio sector y a Leonardo Vaca como volante ofensivo por derecha que le dio peso en ataque apoyando a Gilbert Álvarez, que fue el único delantero nacional ante los japoneses.
En este periodo Takashi Inui fue el más peligroso en la selección local, con dos llegadas al arco de Lampe. La primera, a los 22 minutos, con un enganche se sacó la marca de Jusino, pero su disparo encontró bien parado al meta boliviano. La segunda aproximación fue a los 43' con un remate cruzado que salió cerca de la portería.
Un cabezazo de Rodrigo Ramallo tras centro de Leonel Justiniano, a los 41 minutos, fue lo mejor de la Verde en un primer periodo parejo.
Tras el descanso, Bolivia mantuvo la línea de cuatro en el fondo y un medio campo que tampoco cedió espacios. Castro y Justiniano fueron los recuperadores de balones. En este periodo Villegas ordenó el ingreso de Alejandro Chumacero por Ramallo con la intención de ganar mayor protagonismo de tres cuartos de cancha para adelante.
A los 57', Lampe salvó su arco tras ganarle el mano a mano a Kamada, que tras recibir un pase filtrado quiso colocar el balón, pero el meta nacional salió bien y achicó la portería. Después de esa jugada (59’), el DT boliviano hizo ingresar a Henry Vaca en lugar de Álvarez. Con la variante, Henry ocupó el lugar de ‘Leo’ Vaca en el campo de juego, mientras que el delantero de Blooming pasó a convertirse en el único atacante, función que hasta ese momento estaba en manos de Álvarez.
Pese a los cambios, el partido seguía siendo equilibrado hasta que llegó una contra ‘mortal, producto de una mala entrega de Henry Vaca. El joven volante hizo un pase cortó a Justiniano, que fue interceptado por Takumi Minamino, el delantero emprendió una veloz corrida, entregó el balón a Nakajima que tras enganchar con izquierda desestabilizó a Haquin, para luego sacar un derechazo al primer palo de Lampe. Fue el 1-0 a los 75 minutos, que hizo estallar al público local.
El gol desconcentró a la Verde, que dos minutos después se salvó del segundo con un remate al vertical derecho de Lampe ejecutado por el mismo Nakajima. Bolivia trató de buscar el empate, pero no le alcanzó. Triunfo para el local ante una selección boliviana que jugó bien, pero que un descuido le costó caro.
martes, 26 de marzo de 2019
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