‘Tutu’, como lo conocen en Bolivia, empezó a vincularse al fútbol tras que terminó el bachillerato en el colegio Río Nuevo. Como en el país no dictaban la carrera para comandar un plantel, optó por explorar la prensa deportiva. Ingresó a la carrera de Comunicación Social en la Universidad Domingo Savio y comenzó a dejar sus primeras huellas en Corazón Albiverde, programa partidario del club refinero.
Farah también formó parte de otra producción, Gol de Oro, junto a Lázaro Ferreira (ahora coordinador deportivo de Royal Pari), mientras esperaba la chance más deseada: estudiar para DT. En 2011 inició su carrera en la Universidad del Fútbol y desde ahí nadie lo detuvo. Lo invitaron a realizar una pasantía como analista de video en el equipo refinero cuando Erwin Sánchez dirigía al verdolaga.
La Verde le abrió las puertas
Su primer trabajo fue con el español Miguel A. Portugal (Bolívar) y después en la selección boliviana con Soria (2014-2018), incluso trabajó durante la Copa América Chile 2015, torneo en el que Bolivia se clasificó para los cuartos de final. Las buenas relaciones con la Federación Peruana de Fútbol le permitieron tener contacto con el exjugador peruano Jesús Álvarez, que ahora es el DT de la ‘Rosada’.
Álvarez lo invitó a formar parte de su cuerpo técnico, pero no cumpliendo la función de siempre, sino como su asistente, cargo que comparte con Mauro Reya. Desde finales de 2018, Farah usa lo que mejor sabe hacer para cumplir con sus funciones: el análisis a través de imágenes en movimientos. “Ese es mi fuerte”, aseguró Farah, desde Callao, mientras se alistaba para el debut ante Alianza Lima, el viernes y que su equipo perdió (3-0).
El ingresar al espectro de entrenadores de fútbol, sin haber sido jugador profesional le iba a ser complicado a Farah y por eso optó por explorar un área nueva que, por el 2011, no estaba siendo aprovechada: el análisis de video.
“Vimos que era algo que no le daban importancia en esa época, así que decidimos incursionar”, aseguró el profesional, que junto a Hans Villarroel se abrieron una puerta importante para vivir desde adentro un partido de fútbol. Se capacita constantemente para estar a la altura de las exigencias de un equipo de primera.
“Cuando nosotros empezamos, en Europa ya estaba avanzado mientras que en Sudamérica recién comenzaba”, recuerda. Ahora se ha convertido en un referente en esta área, es más, cuando hay partidos internacionales los rivales de los bolivianos siempre recurren a sus registros.
“Hemos logrado que cuando hablan de Bolivia acudan a nosotros (también a Villarroel)”, aseguró Farah, que en cinco años desea asumir el cargo principal en un plantel profesional.
Farah tiene que viajar durante dos horas para llegar al complejo en donde se entrena el equipo. Cuando recién llegó a Callao tardaba tres horas, así que tuvo que mudarse a otra residencia, porque en total eran seis horas.
Su esposa Karin Rodríguez se trasladó a la ciudad peruana para acompañar a Farah en su desafío con el club peruano, que se salvó del descenso en 2018. El cambio le ha dado tranquilidad.
Para destacar
Amplio equipo. El boliviano trabaja junto a Jesús Álvarez (DT), Mauro Reya (asistente técnico), Yenfred Ledezma (preparador físico), Esteban Mendoza (preparador de arqueros), Eduardo García (Asistente de Video) y a Ernesto Galindo (Analista de Rendimiento).
Dedicatoria. Antes de irse a Perú, Farah fue campeón con Real Santa Cruz, que compite en la Primera A de Santa Cruz, y se clasificó a la Copa Simón Bolívar 2019. El logro se lo dedicó a su fallecido padre, Jorge, que era un hincha renegado del equipo del Pajonal.
No es su familiar. Muchos lo relacionaban con el ahora técnico de la sub-15, Juan Carlos Farah, sin embargo, aclaró que no conoce si en su árbol genealógico tienen alguna relación, pues su ascendencia es de Pando, mientras que del exdefensor es del Beni.
En el fútbol. Farah tiene buenas relaciones con varios futbolistas de Bolivia, también es elogiado por los periodistas del país.
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