Árbitros y asistentes, bajo la tutela de un exmundialista

Bajo la supervisión del argentino Rodolfo Otero, instructor FIFA, exárbitro y exjuez de gran experiencia, el curso Futuro III para árbitros y asistentes FIFA y de primera continuó con una labor exigente en las canchas auxiliares del estadio Félix Capriles.

Con la asistencia de los jugadores de la Sub-19 de Aurora y la presencia de Juan Carlos Lugones, Jorge Antequera y Armando Aliaga, miembros de la Comisión de Árbitros de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), se cumplió la jornada con un trabajo exigente en el que grabaron en video la precisión de los jueces de línea.

“Es un trabajo práctico donde se realizan todas las jugadas en las que puede participar un árbitro asistente. El offside tiene 10 mil y más variedades. Entonces, con el reglamento, irán practicando esas situaciones para ver si están concentrados al momento del juego”, explicó Lugones, presidente de la instancia.

“(Otero) trabaja muy duro con los asistentes porque es su especialidad. Aparte de ser instructor, es maestro de profesión, tiene pedagogía, tiene didáctica”, añadió.

Por otro lado, los árbitros también pudieron trabajar con el instructor designado, practicaron jugadas tácticas, dentro del área grande.

“Rodolfo Otero, por la gran experiencia que tiene, es uno de los grandes instructores de Sudamérica, entonces nos transmite todas las enseñanzas de una forma más comprensible”, declaró Raúl Orosco, uno de los 11 árbitros de categoría internacional que participa del curso que tiene la intención de mejorar el nivel del referato nacional.

El curso continuará hoy y concluirá mañana en instalaciones de la FBF.



OTERO PARTICIPÓ EN LA EXPULSIÓN DE ZIDANE

Rodolfo Otero cuenta con una gran trayectoria internacional.

Fue uno de los jueces de línea durante la final del Mundial de Alemania 2006, encuentro jugado entre Francia e Italia, y que es principalmente recordada por la expulsión del excapitán francés, Zinedine Zidane. Otero fue quien informó al juez central Horacio Elizondo para sancionar al galo.