El Congreso Extraordinario de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) se reinstaló esta mañana en medio de la polémica por las acusaciones del presidente interino, Marco Peredo, hacia varios dirigentes y exdirigentes del fútbol nacional por presuntos actos de corrupción.
Sin embargo, Peredo no quiso hablar respecto a sus declaraciones de ayer en la reunión de Consejo Superior de la Asociación Nacional de Fútbol (ANF).
"Una cosa son los Estatutos, lo reglamentos porque tenemos un compromiso con la FIFA, con la Conmebol, de aprobarlo y ejecutar un cronograma y otra cosa es la interna, eso después se verá", manifestó Peredo al ingresar al Congreso Extraordinario, que se realiza en Cochabamba.
Durante la mañana, llegaron uno a uno los dirigentes del balompié boliviano con la intención de aprobar el Código Electoral del ente futbolístico, en medio de un ambiente "caldeado" por las denuncias vertidas por Peredo el pasado 29 de mayo cuando se aprobó el nuevo Estatuto Orgánico.
"Tenso por la denuncias infundadas y sin documentación respaldatoria. Lamentamos mucho la situación. Particularmente mi persona que ha sido inmiscuida en esta situación después de una conversación ante una solicitud de apoyo", sostuvo el titular de la ANF, Freddy Cortez.
Por otra parte, Peredo señaló que hoy no se tocará el tema de la aprobación del Código de Ética porque aún "no se lo ha terminado", afirmó.
La reunión entró en cuarto intermedio a las 12:30 y se volverá a instalar en horas de la tarde.
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