El expresidente de la Federación Boliviana de Fútbol Rolando López envió ayer una carta a la Confederación Sudamericana de Fútbol explicando que no renunció al cargo, en el ente rector del balompié nacional.
En la nota explica que él fue depuesto de la presidencia en el congreso extraordinario que se realizó el lunes en Cochabamba, sin considerar las recomendaciones que hizo la internacional.
En dicha reunión, los dirigentes del fútbol boliviano “aceptaron la renuncia irrevocable de López”, pero sin que este haya presentado un escrito con dicha postura.
El exdirigente, no presidió el Congreso ya que se encuentra con detención domiciliaria porque es investigado supuestamente por haber recibido sus salarios sin dar clases durante 110 días en la Universidad Mayor de San Simón.
El congreso extraordinario determinó destituir a López de la presidencia de la FBF, con 24 de los 26 votos acreditados. Los únicos clubes que se abstuvieron de sufragar fueron Wilstermann y Bolívar.
La Conmebol aún no se pronunció al respecto, pero conoce el tema.
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