Mauricio Soria, designado este viernes seleccionador nacional de fútbol por segunda vez, luego de la dimisión del argentino Ángel Guillermo Hoyos, regresa a la Verde en busca de su revancha, 16 meses después de haberse marchado por decisión de los dirigentes, pero en medio de una nueva polémica.
Su nominación, anunciada por la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) mediante un comunicado oficial, fue observada por miembros de la Liga que integran el Comité Ejecutivo.
“A mí nadie me consultó”, dijo Marco Peredo, primer vicepresidente de la FBF y titular de la Liga, en declaraciones realizadas tras la reunión del Consejo Superior liguero en Santa Cruz.
Al día siguiente de haberse anunciado —la noche del jueves— la rescisión de contrato con Hoyos, quien por decisión propia abandonó su cargo para irse al fútbol chileno, donde dirigirá a Universidad de Chile, la FBF nominó a Soria luego de una rápida decisión —según el comunicado— tomada por su Comité Ejecutivo tras una consulta con la Comisión de Selecciones.
“Todavía tengo que hablar algunas cosas con el presidente, pues falta acordar detalles, pero estoy contento de regresar”, dijo Soria. El técnico se reunirá el sábado en Cochabamba con el presidente de la FBF, Rolando López.
El dirigente era partidario de nombrar al nuevo DT de la terna que ya había sido estudiada en agosto. El tercer nombre en ella era el de Eduardo Villegas.
“Yo me enteré por el comunicado de la federación y por la prensa, igual que ustedes. No tengo conocimiento de nada, no sé si fue contratado o en qué condiciones se lo contrató, ni cuánto se le va a pagar”, afirmó Peredo a los periodistas.
Según el presidente de la Liga —con quien Hoyos acordó los términos de la rescisión de contrato—, López le sugirió el nombre de Soria, pero la designación debía ser analizada en una reunión de Comité Ejecutivo.
En 2014, Mauricio Soria fue elegido por primera vez. Entonces la federación estaba comandada por Carlos Chávez.
Poco después la continuidad del temperamental DT quedó en entredicho por un exabrupto en una visita a Potosí, pueblo al que tuvo que pedir disculpas.
En 2015 comandó la selección nacional que jugó la Copa América de Chile, donde los resultados de su trabajo comenzaron a aparecer con la clasificación de Bolivia a una segunda fase después de 18 años. Un empate con México y un triunfo sobre Ecuador fueron los resultados más sobresalientes logrados por la selección bajo su mando en esa Copa América, en la que luego perdió con Chile al cerrar la primera fase y cayó ante Perú en la siguiente.
Acusado por haber encabezado un movimiento del plantel exigiendo premios por la clasificación, Soria fue destituido por la FBF en agosto de 2015.
Sin haber conseguido dirigir a la Verde en el principal torneo —las eliminatorias para el Mundial Rusia 2018— para el que había sido contratado antes, Soria es otra vez el técnico para encarar la parte final del premundial.
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