“Todos debemos estar dispuestos a morir para volver a nacer”, disparó el tesorero de la Federación Boliviana de Fútbol, Clíver Rocha, en conferencia de prensa en La Paz, para explicar los alcances de la reunión de la Liga, en la cual se conformó la Comisión de Refundación del Fútbol Boliviano, presidido por el presidente de Sport Boys y Ministro de Gobierno, Carlos Romero.
El tesorero de la FBF fue puntual en que el fútbol boliviano está en crisis y su “punto final”, implica la desaparición de las tres cabezas del balompié boliviano (Liga, Asociación Nacional de Fútbol y FBF), para construir una nueva estructura para plasmar la transformación del fútbol nacional.
“Nadie quiere vivir para que uno muera, eso no, en la construcción de un edificio todo debe hacerse de nuevo, inclusive una nueva dirigencia”, sostuvo el dirigente que representa a la Liga y que anticipó que en el proceso de refundación se escuchará a todos los actores, como Fabol y el periodismo deportivo, más allá de los dirigentes reconocidos por la FBF.
Rocha no se guardó nada y también criticó la iniciativa del presidente de la FBF, Rolando López, por preparar de formar separada un proyecto de estatuto para presentarlo al congreso extraordinario, sin la consulta a los actores del balompié nacional.
“La comisión tiene la misión de construir puentes y de generar procesos de conciliación, y de construir un solo núcleo común de lo que debemos hacer en el fútbol en la forma de construcción de la estructura institucional del fútbol”, sostuvo.
Rocha también defendió la nominación de Romero en el cargo de presidente de dicha comisión liguera, primero como presidente de un club liguero, además de destacar su vocación conciliadora durante la redacción final de la Constitución Política del Estado, por encima de su cargo como ministro de Gobierno.
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