La selección boliviana de fútbol cerró sus prácticas este miércoles con un reconocimiento al campo de juego del estadio Monumental de Maturín, que está “en condiciones impresentables”, se quejaron integrantes del cuerpo técnico y jugadores.
En ese escenario, Bolivia visitará este jueves a Venezuela (19.30) por la jornada 11 de las eliminatorias para el Mundial Rusia 2018.
El responsable de Logística de la FBF, Javier Ávila, envió fotografías de cómo está el estado de la cancha, que testimonian cómo están varios sectores del terreno de juego: sin césped, además con grandes baches y exhibiendo un marcado deterioro.
“El estado del campo de juego del estadio Monumental de Maturín, tal cual lo presumíamos, es verdaderamente lamentable. Indigno de un partido de clasificatoria mundialista. Los testimonios gráficos así lo corroboran”, según la Dirección de Comunicación de la FBF.
Agregó que la Federación Venezolana de Fútbol (FBF) “se opuso a la práctica de rigor de nuestra selección”. Sin embargo, “el comisario FIFA (Javier Quintana, de Perú) la autorizó. El campo de juego es impresentable”.
Trabajadores del estadio aún intentan subsanar el deterioro, aunque a falta de menos de 24 horas para el partido es poco lo que se puede hacer para permitir que la cancha ofrezca condiciones mínimas para recibir a los dos equipos.
La delegación boliviana llegó a Maturín después de unas cinco horas de viaje en un vuelo chárter.
Venezuela (2 puntos) ocupa el último lugar de la tabla de posiciones de las eliminatorias en Sudamérica, mientras que Bolivia (4) está penúltima.
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