“No vamos a tirar la toalla”, sentenció el técnico de la selección nacional, Ángel Guillermo Hoyos, refiriéndose a su plan de trabajo que busca una identidad de juego para la Verde y ante las voces que piden iniciar una renovación total en el equipo boliviano. Hoyos pretende seguir y no renunciar a su propuesta.
“Hay que aceptar todas las críticas y soportarlas porque realmente pueden ser muy duras, hirientes y muy mal intencionadas, vamos seguir trabajando con todo, no vamos a tirar la toalla, ni en lo deportivo, ni en el aspecto humano”, dijo el estratega argentino, que compareció ante los medios deportivos tras el arribo de la selección al aeropuerto militar Bartolina Sisa.
Hoyos agregó que “debe prevalecer la paciencia y el trabajo constante, no hay milagro, eso solo existe el milagro con el todo poderoso, en la tierra hay que trabajar duro”.
El entrenador respaldó en el ingreso del volante cruceño Mateo Zoch, de 20 años, en el segundo tiempo ante los venezolanos, al igual que Pedro Azogue y Diego Wayar, como una forma de recambio generacional. “La elección de Mateo fue pensando al futuro”, respondió cuando fue cuestionado, ya que el representante de Oriente Petrolero no ha completado ni 90 minutos en la Liga.
“Hay 12 jugadores sub-20 entrenando con nosotros, hay chicos jóvenes que están viniendo, nosotros llevamos tres meses, hemos tratado de encaminar este proceso en todo el país”, mencionó reiterando que no se puede modificar todo el fútbol nacional de la noche a la mañana.
Al igual que en Venezuela, Hoyos sostuvo que el gol de camarín de la Vinotinto fue lapidario para mantener el sistema de juego propuesto. “A nosotros nos dolió el resultado y a los chicos más, los chicos le quiere regalar al país romper esa racha de 23 años que no se puede ganar fuera del país”, mencionó.
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