La Conmebol reunió ayer a dirigentes de los clubes clasificados a la edición 2017 de la Copa Libertadores para exponerles los beneficios del rediseño de este torneo y de la Copa Sudamericana que, por primera vez, se disputarán simultáneamente.
"El eje central de estas reformas es elevar la calidad del fútbol y asegurar una mejor experiencia para los aficionados”, dijo en un mensaje a los representantes de clubes el titular de la Confederación Sudamericana de Fútbol, el paraguayo Alejandro Domínguez.
"A partir de ahí, podremos generar más valor para invertir en el desarrollo del fútbol sudamericano y superar algunos de los retos que le vienen restando competitividad a nuestras competencias en el plano deportivo y comercial”, agregó.
El rediseño de los dos torneos busca armonizar los calendarios y criterios de clasificación a nivel continental, y elevar los estándares en la producción de partidos, la experiencia en los estadios y la calidad del arbitraje.
"En Sudamérica nos sobran el talento y la pasión, pero durante décadas nos hemos quedado cortos en planificación, estandarización y generación de valor”, explicó el titular de la Conmebol.
El objetivo estratégico de estas reformas -continuó- es construir una estructura de soporte para nutrir el talento de los futbolistas sudamericanos y reinvertir más valor a las competencias.
El calendario anual (en vez de semestral) facilitará la planificación de los clubes, elevando la calidad de competencia en torneos locales y continentales, según la Conmebol.
El nuevo formato surgió de un análisis de las diversas competencias de cada uno de los países participantes y las fechas FIFA para construir un calendario predecible y estable, que a futuro permitirá a los clubes planificar con la debida antelación. "Celebramos esta iniciativa de ser convocados, de ser escuchados y, sobre todo, que empiecen a adoptarse políticas de transparencia”, dijo Matías Lammnes, presidente del argentino San Lorenzo de Almagro.
"Esto marca un nuevo inicio; un nuevo formato de competencias bajo una nueva Conmebol más comprometida y más participativa, que está hablando con los clubes y abriendo espacios de diálogo dentro de una política de integración, todo con el objetivo de engrandecer al fútbol sudamericano”, comentó Modesto Roma Júnior, presidente de Santos de Brasil.
"Apoyamos las modificaciones de esta transición en el 2017 para que en el 2018 se consolide todo lo que estamos proyectando”, observó Daniel Murillo, vicepresidente de Sport Boys Warnes de Bolivia.
Los equipos bolivianos
Los dirigentes de The Strongest, Sport Boys y Wilstermann asistieron al encuentro informativo que se realizó en Asunción, Paraguay.
"Se trataron diversos temas sobre los beneficios para las asociaciones”, explicó Martín Iturri, que representó al cuadro de Achumani en la reunión.
Mientras que el vicepresidente de Sport Boys, Daniel Murillo, resaltó: "Felicito al presidente de la Conmebol (Alejandro Domínguez) por la apertura y la invitación que nos ha hecho. Debemos darle todo el apoyo a las modificaciones estructurales técnicas deportivas y económicas, y adoptarlas de forma inmediata en este momento de transición”, aseguró el warneño.
Para la Libertadores, la Conmebol dispuso que Brasil tendrá siete plazas, Argentina seis, Chile cuatro, Colombia cuatro y las demás asociaciones sólo tres.
Pedro Vargas representó a Wilstermann, que antes de la reunión pidió un mejor trato económico hacia los clubes participantes en la cita del próximo año.
Como se informó la semana pasada, el nuevo calendario de la Copa Libertadores se aplicará a partir del 2017, que será un año de ajuste de acuerdo al plan de implementación de la nueva estrategia. Lo mismo pasará con la Copa Sudamericana, que debe comenzar en marzo y terminar en diciembre.
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