LOS SIETE ASPIRANTES A LA PRESIDENCIA NO RESPALDAN LOS PROYECTOS QUE TIENEN PARA TOMAR LAS RIENDAS DE LA ENTIDAD

A dos días de las elecciones del nuevo presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), ninguno de los siete candidatos ha presentado un proyecto ante la Liga o la Asociación Nacional de Fútbol (ANF). Lo que sí han realizado los aspirantes al sillón federativo es explicar sus ideas y algunos planes de trabajo con miras a lo que podría ser su gestión en caso de llegar a ser electos. La reformulación del estatuto de la FBF es una tarea encargada por la FIFA, que el nuevo mandamás del fútbol boliviano deberá encarar de forma prioritaria.

Todos coinciden en que se debe recomponer el fútbol, en que se tiene que trabajar en las divisiones menores y que se debe buscar acercamientos con el Gobierno para ver la forma de solucionar el tema impositivo, que ahoga a los clubes profesionales.

Unos creen que se debe poner fin a la trilogía del fútbol nacional compuesto por la FBF, la Liga y la ANF, un sistema del que dicen ya cumplió su ciclo, pero son conscientes de que para ello se tiene que poner fin a los intereses personales y buscar un bien común. Sin embargo, hay quienes creen que se debe mantener así y buscar la forma de devolverles a las asociaciones su título de canteras para nutrir de buenos jugadores el fútbol profesional.

Todos expresan sus ideas y planes, pero ninguno sustenta de cómo lograría recomponer la FBF en lo futbolístico y en lo administrativo.

Las ofertas

Eduardo Peredo, de Blooming, va por la unificación del fútbol, que desaparezcan la Liga y la ANF y se arme una sola estructura. Apuesta a una mejor planificación dentro del seno de la federación. Que el comité ejecutivo de la FBF no sea un ente que actúe al margen de la Liga y la ANF, sino que se debe crear un comité de fiscalización a la federación con el objetivo de transparentar los ingresos y cuyos integrantes deben ser rentados, cosa que dependan y rindan cuenta sólo al congreso federativo.

Por su lado, Hugo Miranda, de la Asociación de Fútbol de Oruro, va por conformar una nueva estructura del fútbol boliviano en base a las recomendaciones de la FIFA. Cree que la Liga debe reducir a 10 sus clubes profesionales y los otros tienen que jugar un torneo Nacional B de forma paralela, esto para darle calidad al campeonato.

Rolando López, candidato por Wilstermann, cree que para hacer los cambios que necesita el fútbol boliviano, el nuevo presidente debe tener el apoyo mayoritario. Apuesta por la capacitación de entrenadores, jugadores y árbitros y por transparentar y mejorar la administración de los recursos que ingresan a la FBF.

Ha sugerido que el nuevo presidente de la federación sea elegido por voto secreto, sistema que es avalado por los estatutos de la FIFA.

Wálter Torrico, candidato de la Asociación de Fútbol de La Paz, ve que los ligueros están divididos y no cuentan con un plan de trabajo como la ANF. Cree que se debe intensificar el trabajo con las divisiones menores, que han sido olvidados.

César Salinas, presidente y candidato de The Strongest, quiere generar un cambio en el fútbol, manteniendo a la Liga y la ANF, buscando el apoyo del Gobierno. Entre los puntos fuertes de su programa está la de darle mayor operatividad y eficiencia a la federación y otorgarles un nuevo rol a las asociaciones y la capacitación a los árbitros, que es una de las partes más sensibles que tiene la FBF.

El candidato de Bolívar, Guido Loayza, va por la discusión de un proyecto en busca de una agenda de transición. “Se trata de una pelea contra una cultura dirigencial corrupta en la que la honestidad se convirtió en la excepción”, sostuvo. Cree que se debe aprovechar la reforma mundial que se está dando en la FIFA y la Conmebol, para armar una nueva estructura en Bolivia.

Finalmente, Miguel Ángel Antelo, candidato de Oriente Petrolero, tiene la idea de unificar a la dirigencia de la Liga y de la Asociación Nacional de Fútbol, para sacar un proyecto que pueda dar fin a la crisis que existe a nivel dirigencial.

Considera que se debe hacer una reunión entre la dirigencia de la Liga y la ANF para hacer un compromiso de puertas abiertas y rodearse de la mejor gente, que aporte con ideas que permitan sacar un proyecto que permita mejorar y salir del pozo en el que está el fútbol nacional.

Finalmente, ofrece transparentar el manejo de la FBF, auditar todas las gestiones pasadas para mostrarle a la gente cómo se ha manejado la federación todo este tiempo.