Julio C. Baldivieso: ‘Sabíamos a lo que veníamos’

El día después de la derrota que sufrió Bolivia ante Uruguay en el inicio de las eliminatorias mundialistas, el seleccionador nacional ofreció una conferencia de prensa. Agradece el respaldo, admite que él es el culpable de lo que pasó en el Siles, pero que además “todos somos responsables”.

— Con cabeza caliente, el jueves, tras la derrota ante Uruguay, dijo que era el culpable y responsable. ¿Un día después eso ha cambiado?

— Culpable soy yo, pero responsables somos todos. Quiero decir que más frontal que este cuerpo técnico no ha habido. Y quiero agradecer a la gente que ha ido al estadio porque casi nunca, después de que un equipo, de que una selección pierde, te ovacionan como lo ha hecho. Eso es digno de destacar. También estoy muy agradecido con los dirigentes, con la gente que nos apoya, y con los periodistas que de repente tienen opiniones distintas, pero que han estado apoyándonos hasta ahora.

— ¿De qué se declara culpable?

— Obviamente quienes colocan a los futbolistas somos nosotros (él y sus colaboradores), y yo como cabeza del cuerpo técnico soy el responsable, pero si leen estos matutinos (muestra algunas publicaciones de ayer) piensan de diferente manera. Haciendo una comparación que nada tiene que ver, si nos están crucificando con diez días de trabajo, con gente joven, qué tendríamos que hacer con el técnico de Argentina (Gerardo Martino), quien ayer perdió como local con la constelación de estrellas que tiene. Yo dije desde un principio que les íbamos a pedir paciencia porque esto no es de la noche a la mañana: ayer (por el jueves) han debutado cuatro o cinco futbolistas (en realidad solo dos, Yasmani Duk y Fernando Marteli) y seguramente en Ecuador pasará lo mismo. Yo había dicho en un principio que queríamos correr un riesgo, que era un riesgo tremendo el dirigir a una selección de repente sin experiencia como las demás, y afrontar un torneo de esta índole no es fácil. De todas maneras vamos a seguir poniéndole el pecho, mientras aquí nuestro presidente (Marco Ortega, titular interino de la Federación Boliviana de Fútbol), ustedes (los periodistas) y la gente nos apoye.

— Hace tiempo Azkargorta decía que ‘la selección es de todos, cuando digo de todos somos todos’. ¿Y ahora la selección es de todos?

— De todos los que amamos a este país sí, porque hay momentos en que uno tiene que apoyar y otros en los que uno tiene que callarse. De todas maneras sabíamos a lo que veníamos, sabíamos que todos no están contentos con nuestra presencia, de todas maneras estamos agradecidos a todos, sean malas o buenas las críticas. Siempre hay cosas buenas para destacar y aprender.

— ¿Qué significó que a pesar de la derrota la gente que estaba en las tribunas ovacionara al equipo?

— En lo personal sorprendido por el cariño de la gente, pero a la vez avergonzado, porque no me gusta perder, ni a mí ni a nadie. Los futbolistas están de la misma manera, están muy dolidos, están muy consternados y ellos tienen sed de revancha.

En lo particular he sentido mucho dolor, mucha decepción de repente por lo que hemos jugado en relación al resultado. Muchos de ellos (los jugadores), casi todos, han dado al 100%. Hemos jugado con una selección que fue campeona del mundo en su momento, que el 90% de sus futbolistas juegan afuera, en Europa. Evidentemente el resultado no es de los mejores y hay que reconocerlo.

— Viene el partido con Ecuador, ¿cómo lo va a afrontar Bolivia?

— Vamos a enfrentar a un rival muy equilibrado, que viene jugando hace mucho tiempo juntos y obviamente va a ser difícil, pero vamos a tratar de dar todo de nosotros. Estoy agradecido con el presidente de antemano, agradecido por su apoyo. Nosotros desde que hemos venido hemos sido frontales y sinceros, hemos dicho que los resultados no vienen de la noche a la mañana. Como nunca creo que hay futbolistas de todo el país, estamos queriendo ir al país, y paradójicamente donde nos dan con todo es en el lugar que más (jugadores) tiene en la selección, que es más representado. Pero bueno, es el futbol nacional.

— Dijo que habrá cambios en la alineación, ¿qué cambios?

— Mañana (por hoy) vamos a empezar a trabajar, obviamente que en este preciso momento nos preocupa la parte anímica, porque ni a nosotros ni a los futbolistas nos cayó bien empezar una eliminatoria perdiendo y de locales. De todas maneras esto no es de la noche a la mañana, es un proceso que tiene que tener su tiempo y lo dije y lo vuelvo a reiterar: alguien tenía que empezar esto, así me dure cinco, seis partidos, dos años, diez años, dos meses, el técnico que venga después del tiempo que nos quedemos nosotros seguramente tendrá una base importante de la selección nacional. No se olviden que El Maestro (Óscar) Tabárez está más de diez años en la uruguaya.

— ¿Anímicamente el plantel está muy mal?

— Estamos en eso, trabajando en lo sicológico junto al cuerpo técnico al que tengo el honor de pertenecer. Ustedes tienen que saber que Fernando Muslera (el arquero de la selección uruguaya) ya jugó dos mundiales, Diego Godín (el defensor y capitán) es uno de los mejores centrales del mundo y goleador aparte en el Atlético de Madrid, entonces nos hemos enfrentado a una selección muy buena, que aparte de trabajar en su selección son futbolistas que por mucho tiempo tienen su vida saneada, que obviamente son distintos los valores que tienen ahí. De todas maneras nosotros vamos a ir a lo nuestro: honestidad, sinceridad y seguramente va a ser un partido muy complicado el próximo martes. De todas maneras confío mucho en la mística del futbolista boliviano.

— ¿Va a mejorar Bolivia para el próximo partido?

— Es muy difícil armar en diez días un equipo competitivo; el que tiene la fórmula de entrenar ese tiempo y clasificar a un equipo a una Copa del Mundo que me lo presenten. Los grandes técnicos: Mourinho, Guardiola, los mejores del mundo, dicen que para formar un equipo necesitas entre uno y tres años, mínimamente, nosotros llevamos diez días, pero de todas maneras no vamos a eludir nuestra responsabilidad.