sábado, 18 de julio de 2015
‘Tenían bajo el brazo la orden’, según abogado Jaime Tapia
La aprehensión de Carlos Chávez “va muy de la mano con una interferencia desde otras entidades y sobre todo desde otros mandos” con la finalidad de “querer hacerse cargo de la presidencia de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) a título judicial”, según denunció ayer Jaime Tapia, abogado del dirigente.
“El Ministerio Público tenía bajo el brazo una orden de aprehensión, es decir que el acto de defensa material de Carlos Chávez era un acto formal y absolutamente inútil”, según su versión, dando a entender que antes de que el titular de la FBF se presente a declarar ya estaba decidida su detención por parte del Ministerio Público.
El fiscal general del Estado, Ramiro Guerrero, dijo que la orden no fue tomada solo por la declaración presentada por Chávez, sino en el marco de “una investigación seria”.
“Es muy preocupante esto. Bolivia tiene consagrada en la Ley del Deporte la garantía de que las instituciones del fútbol están amparadas en una normativa, primero interna y por otra parte internacional, por tanto cualquier interferencia e intervención de terceros en la FBF es absolutamente ilegal. No queremos decir con ello que la FBF ni sus autoridades estén excluidas de cualquier sometimiento a la ley”, agregó el abogado del titular de la FBF.
De acuerdo con su versión, en el mandamiento de aprehensión que recibió Chávez “se está usando como causal de la detención una supuesta estafa agravada por el hecho de que se celebró en 2013 un partido de fútbol que se hizo previo convenio entre las federaciones de Bolivia y Brasil para recaudar fondos en favor de la Federación nacional”.
Ese hecho ha sido tomado “de manera vergonzosa, para mí bochornosa en un estado de derecho. Así el dirigente no nos simpatice o tengamos divergencias y diferencias con él, no le da derecho a ningún gobierno, a ninguna entidad política, a ningún funcionario público, ordenar a dedo la detención de nadie”.
Siendo que la Fiscalía General del Estado “es independiente, primero debió escuchar al denunciado y no solo valerse de una simple denuncia del señor (Wálter) Zuleta para obrar como si fuera ésta una agencia del Gobierno”. Desde su punto de vista “no había ningún motivo legal, ningún justificativo” como para ordenar la aprehensión de Chávez. La misma se ha dado, sin embargo, “ante una primera sindicación y una denuncia no investigada”.
Zuleta denuncia estafa en un partido Bolivia vs. Brasil
Jaime Tapia, abogado de Carlos Chávez, dijo que la aprehensión de su cliente ordenada por el Ministerio Público fue a raíz de una denuncia presentada por el dirigente de Bolívar y hoy tesorero de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Wálter Zuleta, por una supuesta estafa agravada en el partido amistoso Bolivia vs. Brasil jugado el 6 de abril de 2013 en Santa Cruz. Zuleta no fue citado a declarar por el Ministerio Público, sino que se presentó voluntariamente el 19 de junio, e hizo la denuncia, según Tapia.
De acuerdo con un documento oficial, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) autorizó que la recaudación de ese partido fuera a beneficio de la FBF. El mismo descartó una versión anterior en sentido de que sería para la familia de Kevin Beltrán, un joven hincha de San José que murió en el estadio Jesús Bermúdez de Oruro al impactarle una bengala en el rostro, en febrero de 2013, en un partido de su equipo ante el brasileño Corinthians por la Copa Libertadores de América. Wálter Zuleta no respondió los llamados que le hizo ayer Marcas de La Razón.
Su denuncia se basa en una declaración que hizo José María Marín, titular de la CBF, anunciando que toda la recaudación del lance sería para la familia Beltrán. El dirigente brasileño dijo que los jugadores brasileños se mostraron solidarios para que “todo el dinero vaya” para la familia de Kevin.
Sin embargo, la comunicación oficial de la CBF, firmada por el propio Marín, le entregaba a la Federación toda la potestad sobre el dinero recaudado.
De manera voluntaria, la FBF ofreció entregar una parte de lo recaudado a la familia de Beltrán y otra a los integrantes de la Selección Nacional que fueron campeones del Sudamericano de 1963, que en 2013 conmemoraron los 50 años de esa gesta, recordó el secretario ejecutivo de la FBF, Alberto Lozada.
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