Con la canasta repleta de goles y con la sensación de que pudieron ser más Bolivia se despidió de la Copa América con una derrota ante Perú por 3-1, donde nuevamente la última línea fue lo más flaco del equipo nacional. Diez goles encajados y con apenas cuatro marcados la Verde deberá empacar maletas para retornar al país en las próximas horas.
El equipo del entrenador Mauricio Soria, que en su época de jugador se desempeñó como arquero, en los dos últimos partidos sufrió ocho tantos, cinco por parte del anfitrión Chile y otros tres del ‘Depredador’ Paolo Guerrero de Perú. Los dos restantes fueron recibidos en la victoria ante Ecuador.
El único compromiso donde el arco de Romel Quiñónez terminó en blanco, fue en el empate 0-0 ante México, que marcó el debut de la selección boliviana en el torneo chileno. Balance negativo para un equipo que vino de más a menos en la Copa.
Quiñónez tuvo un amargo regalo de cumpleaños
El dueño del pórtico nacional, Romel Quiñónez, recibió el peor regalo en su cumpleaños número 23, ya que fue vulnerado en tres ocasiones en el duelo ante Perú y también porque la derrota significó la eliminación de Bolivia en la Copa.
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