La Asociación Nacional de Fútbol (ANF), el bastión en el que Carlos Chávez apoyó su reelección el año pasado como presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), y en el que todavía se sostiene, se reunirá el sábado en Trinidad con la finalidad de analizar la situación provocada por las sospechas de corrupción, y adoptará una posición.
El viernes, el Consejo Superior de la Liga se reunió en La Paz y determinó pedirle a Chávez que solicite licencia de su cargo de presidente de la FBF mientras duren las investigaciones. Con el anuncio de la dimisión de Joseph Blatter a la FIFA, que se hará efectiva en el próximo congreso de esa entidad a comienzos de 2016, ayer en Bolivia hubo una “ola” en las redes sociales pidiendo también la renuncia de Chávez.
El presidente de la ANF, Jorge Justiniano, quien es a la vez segundo vicepresidente de la FBF, confirmó la reunión de su entidad, pero aclaró que se trata de una convocatoria hecha antes y no recién, y admitió que se hará una evaluación “de la situación que se vive”.
“Ayer (por el lunes) recibimos una información pública del manejo económico de la FBF y seguramente esa figura la vamos a analizar en la ANF en conjunto, y no de manera separada, para ver qué camino vamos a tomar ahora, más aún con esta historia que se presenta en el ámbito mundial”. Calificó de “apresurada” la postura que asumió la Liga con base en “conjeturas y publicaciones de la prensa internacional”.
En cambio, en la ANF “nos sentaremos todos a discutir una problemática sobre la realidad de nuestro fútbol, siempre dentro de los marcos institucionales, porque para eso están las instituciones y sus normas”. Recordó que Liga y ANF son “miembros de la Federación y estamos obligados a ser respetuosos de las normas”. Instó a “no actuar de manera unilateral, sino siempre conjunta”.
Aseguró que el análisis que hará la ANF “será claro sobre una circunstancia particular” y lamentó que haya “interés de algunas personas por acceder a las instancias de la Federación. A ellas les digo que para eso están los caminos democráticos, estatutarios, así manda la democracia”. “Si (Carlos) Chávez, (Fernando) Humérez (presidente de la Liga) o (Jorge) Justiniano se tienen que ir, se irán pues, pero por causas justificadas y no por acusaciones e intereses a los que se piensa dar fuerza”, enfatizó.
Anunció que es probable que al encuentro de la ANF sea invitado el presidente de la FBF, “en una de ésas tomamos alguna decisión, o por ahí no, pero entre todos, sin que falte nadie, eso es lo serio, siempre todos y no con intereses personales, sectarios y personalistas. La ANF es una parte importante del fútbol boliviano y no vamos a permitir que solo una parte del fútbol (la Liga) sea la única que decida”.
Consultado sobre si las asociaciones mantienen su apoyo a Chávez, dijo que la “ANF es una institución conformada por nueve asociaciones, yo soy Jorge Justiniano, presidente de ella. El sábado nos reuniremos, evaluaremos y veremos qué decisión tomamos”.
La Liga ‘quiere generar inestabilidad’
La ANF —dijo su presidente, Jorge Justiniano— no quiere seguir el camino que tomó “alguna dirigencia del fútbol profesional (de la Liga), de querer generar inestabilidad y crisis en el fútbol”. Los hechos por denuncias de corrupción en la FIFA, que han salpicado entre otras entidades a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y a sus diez federaciones miembros, entre ellas la de Bolivia, “naturalmente han generado un efecto secundario, porque somos parte del fútbol mundial, que está sumido en una crisis, pero nosotros tenemos nuestra propia realidad”.
Antes de lanzar acusaciones “había que preguntar primero si los bolivianos estuvimos en esos hechos internacionales que se denuncian, y no denigrar a quienes los representamos”. Justiniano asistió junto con Chávez la semana pasada al congreso de la FIFA en el que Joseph Blatter fue reelegido.
“Para nadie es desconocido que desde hace tiempo hay algunas personas que están buscando llegar a la Federación. Yo no quiero defender absolutamente a nadie, pero hubo otros que vinieron con proyectos de hacer desaparecer las asociaciones y eso es querer destruir el fútbol nacional. Algo absurdo, las asociaciones departamentales hacen fútbol desde las bases, pese a las dificultades económicas”.
Chávez presentó el lunes documentos demostrando que los dineros que recibió de la Conmebol fueron a dar a las cuentas de la FBF. Pero, ¿en qué fueron gastados? Según Justiniano, “son los gastos corrientes, desde haber pagado y actualizado el tema de los impuestos que muchas otras gestiones no cubrieron hasta sostener el mantenimiento, la preparación y todo lo relacionado con la selección boliviana. Ahora mismo tiene un costo en donde se prepara. También las selecciones menores y alguna ayuda que se da a las asociaciones y a los mismos clubes”.
Los que votaron por Blatter ‘que renuncien’
Jaime Ayllón
Guido Loayza, presidente de Bolívar, dijo ayer que “los señores que manejan el fútbol” en Bolivia “por decencia deben renunciar, los que han votado y apostado por Joseph Blatter deben renunciar”, en alusión al presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). Sugirió además que sería bueno que no solo él se vaya, sino que el resto de la cabeza del fútbol boliviano. “Todos deben renunciar para que se transparente y se pueda empezar a hacer un fútbol totalmente distinto”.
Loayza es el primer opositor a la gestión de Chávez en la FBF y en este caso de supuestos actos de corrupción “no podemos estar a medias: ustedes (la prensa) y nosotros, los dirigentes, o estamos a favor del cambio en el fútbol o estamos a favor de la continuidad de esto que se ha mantenido penosamente durante tantos años, entonces yo creo que las autoridades, los dirigentes, los periodistas, todos deben hacer investigación y todos deben denunciar, cualquiera que sepa cualquier cosa debe denunciar, se tiene que investigar y hay que investigar a todos, caiga quien caiga”.ç
Añadió que toda esta situación ha llegado a extremos al punto de hacerse inmanejable, pero que por otra parte quienes también hacen fútbol como los alemanes, españoles, franceses, italianos, no aguantaron más la situación y dijeron basta.
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