El partido amistoso que debían jugar este domingo las selecciones de Bolivia y Venezuela al final no se realizará. El motivo, la Conmebol no recibió la autorización de la FIFA para avalar este compromiso, por lo que no será tomado como un partido internacional.
Esta decisión es un duro revés para la Gobernación de Mendoza, que coordinaba las acciones en la organización de este compromiso junto con directivos de ambas federaciones. La idea era darle al público boliviano que reside en Mendoza (son cerca de 250.000 personas) un motivo para ver de cerca a su selección.
Incuso este viernes, el ministro de Deportes de Mendoza, Marcelo Locamuz, visitó a la selección en el estadio Malvinas Argentinas para agradecerles por haber elegido a su provincia para jugar previo a la Copa América.
Pasaría a ser una práctica
La intención, tanto de Mauricio Soria, DT de Bolivia, como de Noel Sanvicente, DT de Venezuela, es muy clara, ellos quieren jugar porque les favorece a sus intenciones de pulir errores y fortalecer sus sistemas previo a la Copa, por lo que se pactaría unos práctica informal de fútbol.
Es decir, que se jugaría un 'picadito' de 30 minutos por lado en el que no habría un árbitro oficial dando el silbato a un miembro del cuerpo técnico de cualquiera de las selecciones. Esto se definirá en las próximas horas
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