Sport Boys tiene nuevo presidente, el senador masista Carlos Romero, exministro de Gobierno. La idea —dice— es evitar que el club desaparezca y salvarlo del descenso. Asegura que no hay una línea política detrás de esta decisión.
— Usted es político, exministro de Gobierno, senador del Estado, ¿por qué decide asumir como presidente de un club de fútbol?
— Por las circunstancias que se han dado. No es que yo he buscado la dirigencia del fútbol, tampoco la de Sport Boys en particular. Lo que pasa es que el club ingresó en una profunda crisis institucional debido a que se vio seriamente debilitado, ya que dos presidentes renunciaron sucesivamente, me refiero a Mario Cronembold y Luis Ruiz, parte de la directiva también se fue; entonces, el equipo quedó debilitado en la parte institucional, al mismo tiempo en el orden económico, es un club con deudas, con una serie de obligaciones pendientes, al extremo que ni siquiera tenía condiciones para cumplir su compromiso de Cochabamba con Wilstermann (27 de febrero), porque tenía un presupuesto de 4.500 dólares solamente para cubrir los costos logísticos. Además, es un equipo con procesos judiciales, usted sabe que Fabol estuvo a punto de paralizar el inicio de este campeonato precisamente por las deudas con los jugadores de Sport Boys, y hay procesos judiciales instaurados por exjugadores, por el extécnico Néstor Clausen. También es un plantel que no ha hecho pretemporada, estuvo en huelga en ese tiempo, entonces tiene una serie de deficiencias en la parte física, con resultados adversos en la parte futbolística, y anímicamente (los jugadores) están derrumbados.
— ¿Y como se animó con tantos problemas encima?
— Es que si alguien no le ponía el hombro, yo diría que el equipo prácticamente se deshacía, porque hay jugadores que durante muchos meses han cobrado una sola planilla, o sea había el riesgo de que abandonen el club, de hecho algunos se fueron, y ni siquiera hubiéramos tenido un plantel para enfrentar a Nacional Potosí. El equipo otra vez estaba en huelga el lunes, entonces en esas circunstancias es que he asumido por un compromiso con Santa Cruz, con Warnes, con el fútbol, en condiciones totalmente adversas y desoyendo el consejo casi unánime de la gente que me dijo que me estaba embarcando en una locura.
— ¿Después de ver lo que pasa, es una locura?
— Todas las condiciones son adversas, pero hay un elemento que ha sido significativo para que tomemos esta decisión y ha sido el compromiso de los jugadores. Ahora lógicamente es un plantel que tiene muchos problemas, no responde a una conformación que sea la ideal. Luego, el principal problema de Sport Boys es la parte física, es un equipo que juega un solo tiempo, porque no ha hecho pretemporada y una exigencia física muy intensiva a estas alturas del campeonato conllevaría el riesgo de las contracturas y las lesiones, entonces, estamos planificando un trabajo especial con algunos jugadores y una subdivisión en grupos para intensificar e ir rotando a sugerencia del comité técnico.
— Su partido, el MAS, su línea política o el Gobierno nacional e incluso el presidente Evo Morales, ¿tienen algo que ver con su vinculación a Sport Boys?
— No. Lo único que tiene que ver en esto es mi compromiso con Santa Cruz. Yo le debo mucho a Santa Cruz y obviamente estoy defendiendo su plaza liguera. Para nada he conversado para esta decisión con gente del nivel político y no pienso entremezclar lo futbolístico con lo político, porque sería un error. Al mismo tiempo, en lo personal me está permitiendo aprender mucho, porque estoy viendo problemas estructurales del fútbol de más cerca y obviamente creo que va a ampliar mi visión sobre este deporte, y como soy una persona comprometida con el fútbol, esta enseñanza me servirá para más adelante.
— ¿Cuál es su plan o su proyecto para salir de este mal momento?
— No es que planificamos esto o definimos una estrategia, ¡no!, apenas hemos concebido un plan de emergencia que lo hemos denominado Plan Triangular, porque tiene tres componentes.
— ¿Cuáles son?
— El primero, un fortalecimiento institucional con la presencia de algunas personas importantes del medio, que nos van a coadyuvar en estabilizar la institución y reorganizarla. En esta estructura institucional es muy importante el aporte de gente como Danilo Murilo, que es un empresario que maneja varias industrias; o Clíver Rocha, quien es una persona que ha mostrado mucha capacidad de gestión en entidades públicas; el abogado Germán Bacigalupo, para que nos maneje la parte legal; y un comité técnico que está constituido por Guillermo Aüe y dos técnicos nacionales: Fernando Sainz y Javier Suárez, que han hecho estudios en el extranjero y están fortaleciendo ese comité técnico; además de haber rescatado a lo que quedaba de la directiva anterior.
El segundo pilar ha sido formar una estructura empresarial mínima, es decir comprometer algunos apoyos para poder paliar los costos económicos más urgentes, pero esa es una tarea que va a proseguir en los siguientes días.
Y el tercer componente lógicamente es la parte deportiva estrictamente, hemos formado un comité técnico que colabore con las funciones de la dirección técnica, se ha contratado un preparador físico porque el plantel no contaba con uno.
— ¿Con este panorama están logrando que algunos jugadores vuelvan al plantel?
— Se ha recontratado a José Alfredo Castillo porque en el informe técnico que tenemos del partido con Real Potosí (0-0) se ha visto muchas falencias en la definición y le hemos dado alguna estabilidad mínima al grupo para que pueda concentrarse en su trabajo.
— ¿Ya pagaron algo de la deuda?
— En el tema de los juicios vamos a ver qué se puede negociar en términos de planes de pago; además hemos cubierto en un 75% la planilla de enero, el sábado hemos abonado un porcentaje más.
Fácil sería decir para nosotros “nos hacemos responsables desde el día que tomamos el control del club”; pero no, estamos asumiendo las planillas desde enero, afortunadamente la directiva de Ruiz bajó significativamente la planilla en menos de un 50% con relación a la que se tenía antes y desde ese punto de vista hemos devuelto un poco de tranquilidad a los jugadores.
— ¿Cuánto dinero se va a necesitar para llevar adelante este plan?
— Es un tema un poco delicado, porque muchas veces se especula mucho; lo que sí le puedo decir es que tenemos que tener cinco planillas hasta la finalización del campeonato, los costos logísticos y administrativos son montos relativamente significativos.
— ¿Usted pondrá plata de su bolsillo?
— Vamos a ver, yo grandes posibilidades tampoco tengo, pero lo importante es que tengo el apoyo de algunos sectores empresariales.
— En algún momento usted, el mismo presidente Evo Morales, han expresado un rechazo a la actual directiva de la Federación Boliviana de Fútbol, ahora, como dirigente del fútbol, ¿va a trabajar en el tema de cambiar a la dirigencia de la Federación, a las estructuras del fútbol a las que tanto se critica?
— Considero que es muy prematuro pensar en esto porque con la situación de Sport Boys tengo demasiada carga encima, así que en este momento la prioridad y la exclusividad es Sport Boys.
— ¿Podrán escaparle al descenso?
— Esa es la idea. De acuerdo con el informe de la comisión técnica, tenemos una puntuación como desafío de 12 puntos. Tenemos 18 puntos de local y 18 de visitante, soy optimista de que podemos salvar la categoría y si salvamos la categoría, al mismo tiempo transicionalmente veremos cómo le damos una sostenibilidad al equipo.
— Usted es el presidente, ¿irá a las reuniones de la Liga?
— Claro que sí, me gustaría estar allá. Ojalá que no coincidan con las sesiones del Parlamento, pero cuando pueda estar lo voy a hacer.
— Usted siempre ha manifestado que es hincha de Bolívar, ¿ahora hincha de qué club es?
— Yo soy bolivarista, eso lo sabe todo el mundo; pero ahora mi compromiso es con Sport Boys.