La reunión que sostuvieron los dirigentes de Sport Boys y los representantes de Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) ayer en Santa Cruz no encontró una salida a los problemas relacionados con las deudas económicas y se abrió un cuarto intermedio hasta el lunes.
Los jugadores del cuadro de Warnes piden el pago de la deuda del año pasado, de la gestión de Mario Cronenbold, pero la actual directiva indicó que no cuenta con recursos para cumplir con esto y este conflicto puede provocar que el torneo Clausura de la Liga no se inicie el próximo 16 de enero. “Nos dimos un compás de espera hasta el lunes, ese día nos volveremos a reunir (en Santa Cruz), ojalá con una solución para el bien de todos y podamos comenzar el campeonato porque este año tenemos una agenda apretada”, declaró el presidente de la Liga, Fernando Humérez, quien intercedió entre ambos en procura de una solución.
El asesor legal de Fabol, David Panigua, pidió a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) hacer valer los reglamentos para evitar que las deudas sigan creciendo entre los clubes, algo que se volvió frecuente en los últimos años.
“Los dirigentes deben tener la capacidad de encontrar una solución concreta, sino corre riesgo el inicio del torneo, no porque Fabol no quiera, sino porque los dirigentes no han sido responsables”, indicó el abogado.
Humérez reveló que Sport Boys ya pignoró sus recursos por derechos de televisación y el monto que le corresponde por la participación de la Selección Nacional en la Copa América Chile 2015, proveniente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
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