Múltiples charcos de agua se formaron en todo el gramado, que hacían imposible la realización del juego. La dirigencia pandina, liderada por su presidente, Ludwing Arciénaga, se movilizó buscando la forma de ayudar a que el campo de juego se vacíe.
Trapos, rodos y baldes eran las herramientas utilizadas para sacar el agua, labor que era realizada ante la atenta mirada de los responsable de la Liga. "El drenaje funcionó, pero se le dio una ayuda", dijo Arciénaga. Las labores dieron resultado, aunque el campo no quedó en buenas condiciones, aún así se pudo dar el estreno de fútbol profesional en Cobija.
El domingo, Universitario recibe a San José de Oruro, cumpliendo la sexta fecha liguera (15:00). Los pandinos esperan la inauguración de su nuevo estadio, que será entregado en marzo de 2015.
Quejas de la visita
"Fue Real Potosí el que tuvo que pagar los platos rotos en este estadio", dijo Henry Lapczyk, portero del cuadro lila tras la finalización del partido, en el que terminaron llevándose un punto luego del empate a cero ante Universitario.
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